jueves, 27 de noviembre de 2014

Fiesta del té

Todas las muertes se juntaron a conversar del trabajo duro y a comparar frasquitos: de lágrimas, palabras, maldiciones, agradecimientos, úlitmos deseos, poemas, canciones [...]; esas cosas que les lanzaban con el último aliento. También tinían bordadas en el interior de sus cuerpos los suspiros de todas esas criaturas que las saludaban como viejas amigas, moviendo la cola, cerrando los ojos, bajando el ritmo cardíaco, respetuosos. 
De todas las muertes, una tenía una oz y otra iba descalza, algunas tenían alas y otras colmillos, varias preferían cambiar de forma constantemente, a las macabras les gustaba hacerse collares de dedos del pie y lenguas resecas como pasas, las tristes se adornaban con las ropas de sus pueblos olvidados, las grandiosas llevaban hojas de oro prendidas a la ropa de seda; adoraban personificar sensaciones: una caricia, el filo de un cuchillo contra la piel desnuda de la espalda, un dolor de muela llena de caries, la picadura de una pulga en verano, una babosa caminando por la pierna de un dormido, una araña entrando a la boca de un niño mientras sueña, el sudor después de bajarse del metro, el viento helado de la cordillera, el hielo bajando por entre los pechos, la piel de gallina tras la mención de la persona amada, las lágrimas después de una buena película, el aburrimiento de un libro obligatorio, el asco hacia el olor del alcohol, el alivio tras las drogas, la hinchazón de la herida de la jeringa en la vena, la crucificación, la llaga en el corazón de la humanidad.
A la mayoría le gustaba vestirse de personas; de mendigo helado, de monja oportunista, de Medea, de cura pedófilo flagelándose a las dos de la mañana, de adolescente llorona, de político corrupto, de hombre machito, de cadavérica abuela dejada en el asilo hace diez años, de violador psicópata, de cantante pop, de huinca ingnorante,de español conquistador, de gringo come hamburguesas y libertad, de personaje anime, de actor de película porno, de prostituta portadora de enfermedades morales, de cuica derechista prejuiciosa, de rubia despampanante, de caballero del santo grial, de huaso culiao machista,

de humano extinguiendo a su propia raza en un vaso de soberbia.

Muerte y vida, Gustav Klimt

No hay comentarios:

Publicar un comentario